CONSECUENCIAS DE LA INDEPENDENCIA DE CATALUÑA



 A raíz de la decisión del pueblo de Cataluña, el Parlamento Catalán ha declarado su independencia. Por otro lado, el Senado español ha aprobado la decisión de hacer cumplir lo establecido en el artículo 155 de la Constitución, que permite intervenir sobre una provincia autónoma. Sin embargo, el futuro sigue siendo poco claro. En este escenario entre España y Cataluña la realidad puede ser vista desde diferentes perspectivas. Ahora bien, la primera pregunta que florece es ¿Sobrevivirá Cataluña como un Estado independiente?

De originarse la separación de Cataluña de la Unión Europea, cesará su acceso a un mercado en el que las personas puedan gozar libremente sin necesidad de visas o permisos aduaneros. Las grandes empresas y universidades del estado de Cataluña tampoco podrán participar en programas de investigación europeos, que forman parte de una fuente de financiamiento para muchos científicos. Adicionalmente, al quedar fuera de la unión europea, Cataluña no tendrá acceso a la red de seguridad que provee el Banco Central Europeo (BCE).

Por otro lado Cataluña carecerá de acceso a la moneda europea, por lo que deberán imprimir su propia moneda. La independencia de Cataluña generará un cambio en el comportamiento de la economía. Según declaraciones del gobierno catalán, su región genera a España, unos 16.000 millones de euros, lo que representa un 10% de su Producto Interno Bruto. Pero esto no significa que Cataluña obtendrá 16.000 millones de euros instantáneamente, ya que deberá cubrir los gastos que antes eran asumidos por España. Dentro de los gastos está el ejército, la seguridad social y las jubilaciones. Según cálculos preliminares, una vez cubiertos todos estos gastos, al gobierno Catalán le quedaría 8.000 millones de euros.


Otra consecuencia de la independencia será la migración de empresas nacionales. Durante los días siguientes al referéndum de octubre del año pasado, más de 900 empresas retiraron su sede en Cataluña, según datos del Colegio de Registradores de España. No es de extrañar entonces que compañías emblemáticas, como Gas Natural Fenosa, una de las compañías energéticas más grandes del país, abandonara el territorio de Cataluña, aunque afirmó que se trata de una medida temporal.

Al final de toda esta serie de acontecimientos, es notable que para bien o para mal serán resultados, como dicen los expertos, completamente irreversibles en la economía de ambos países.

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