PROS Y CONTRAS DE QUE ESPAÑA PERTENEZCA A LA UNION EUROPEA

 





Países de la UE


Aunque nació en 1957, la UE no consiguió convertirse en un mercado común hasta la década de los ochenta, momento en el que se incorporaron España y Portugal, concretamente en 1986. Así, tras una década de preparación, en 2002 nació físicamente el euro, y con él la Unión Económica y Monetaria

La Unión Europea es es una entidad geopolítica que cubre gran parte del continente europeo. Es una asociación económica y política única en el mundo, formada por 28 países. La UE cuenta con una moneda única, una bandera, un himno y el día de Europa, que se celebra cada 9 de mayo. La entrada de España a la misma se hizo efectiva en 1986, pero la firma del Tratado de Adhesión en Madrid se produjo en junio de 1985. Este hecho tiene tantos sus pros como sus contras para nuestro país y vamos hacer un repaso de los más importantes de todos ellos empezando por los contras.

Quizás se trate del principal inconveniente de nuestra querida UE: las zonas más pobladas e industriales tienen mayor facilidad para atraer inversiones que el resto de zonas. En general, el triángulo que forman Londres, París y Berlín aglutina la mayor riqueza de la UE. El desequilibrio regional entre esta zona y otras como Andalucía o Grecia es abismal.

Al igual que sucede en España, donde zonas como País Vasco, Cataluña o Madrid tienen más fácil crecer económicamente gracias a su industria y población, en Europa existen grandes regiones industriales que se benefician más de estar en la Unión Europea, cuando lo deseable sería que quienes se beneficiaran fueran las menos favorecidas. Además, como consecuencia de la utilización de una moneda común, los problemas de un país pueden contagiarse con gran facilidad a otros o dar lugar al rescate de los otros para que la moneda no pierda credibilidad. Como bien sabemos, la Unión Europea tuvo que rescatar  a Grecia tres veces (la última en 2015) para que el país pudiera afrontar los pagos internos, así como los pagos de la deuda internacional. De no haberlo hecho, Grecia habría quebrado y, como consecuencia, es más que probable que se hubiese llevado a la economía española por delante. El efecto dominó habría supuesto también la caída de Italia y quién sabe si no el fin de la zona euro tal y como la conocemos. Para los críticos de la UE, este es el principal motivo por el que habría que ponerle fin al proceso integrador. La pérdida de soberanía afecta tanto a la política exterior (para el conjunto de países de la UE) como a la política monetaria (para los países de la eurozona). Como es lógico, pertenecer a la UE requiere de consensos para la aprobación de decisiones que antes se podrían haber tomado de forma individual. El ejemplo más obvio es el del Banco Central Europeo, que toma decisiones sobre el euro para todos los países de la eurozona, con independencia de los intereses propios de cada país.

Por otro lado, estar en la UE supone formar parte de un mercado único (el llamado Mercado interior), en el que las mercancías, los servicios, los trabajadores y los capitales circulan libremente, sin obstáculos y sin ser objeto de discriminaciones. Gracias a esto, los bienes producidos en España pueden exportarse a otro Estado miembro sin estar sujetos al pago de aranceles aduaneros y los españoles pueden trabajar (por cuenta ajena o propia, de manera temporal o permanente) en otro país de la UE en condiciones de igualdad con respecto a los nacionales del Estado miembro de que se trate. En el plano internacional, la pertenencia a la UE refuerza la posición de España. Es evidente que, por ejemplo, las medidas que amenaza con tomar Bruselas frente al proteccionismo de la Administración Trump serán mucho más influyentes que las que podría adoptar España estando fuera de la UE. Y que la UE tiene más fuerza a la hora de imponer su posición en una negociación internacional de la que tendría España actuando en solitario. Tampoco podemos olvidar que, en su historia reciente, España siempre ha mirado a Europa como sinónimo de progreso y punto de anclaje para sus reformas políticas, sociales y económicas. Durante la transición, el proyecto de pertenencia a la UE sirvió de faro para la consolidación democrática, a la vez que la integración en el mercado único abrió un mundo de posibilidades para las empresas españolas.

Mirando también desde el punto de vista en el que los estudiantes son los beneficiados, las políticas sociales europeas promueven el empleo, la educación y la formación, y contribuyen a mejorar las condiciones de vida y de trabajo, a proporcionar una protección social adecuada y a combatir la exclusión social. Por ejemplo, España recibió 3,2 mil millones de euros de la Iniciativa de Empleo Juvenil y del Fondo Social Europeo para ayudar a la integración de los jóvenes en el mercado laboral, además de la oportunidad del Erasmus, a la que la mayoría de estudiantes tiene acceso para realizar una estancia en el extranjero en el marco de este  programa.

https://www.bde.es/f/webbde/GAP/prensa/intervenpub/diregen/estudios/ficheros/es/estu151001.pdf

https://ec.europa.eu/spain/business-funding/ttip/advantages-for-spain_es

Comentarios

  1. Que interesante! Intentaré que esta información le llegue a más personas para poder aprender de algo de lo que hablamos en el día a día!

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  2. Para ser breve, habéis dado con la clave. Eso sí, es un tema muy complejo y es bueno entrar en detalle (por si hacéis análisis más extensos). Lo compartiré con mis alumnos

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  3. El día 2 de enero compre una serie de cosas que antes pasaba por la aduana sin problemas y por dos dias que hacia que Reino Unido habia salido de la Union me las quitaron en la aduana, hay me di realmente cuenta de que la CEE es tan importante para la circulacion de mercancias entre los paises miembros lo que supone riqueza para cualquier pais que la integre.

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